Desde el próximo viernes, cuatro equipos competirán en Tunuyán para lograr la permanencia en la Liga A2. Además del local, allí estarán Estudiantes, La Matanza y La Calera de Córdoba, justamente éste último, en su primera participación buscarán reafirmar la plaza para crecer la próxima temporada. Josué Montalbán, que llegó a La Calera después de sus temporadas en Ateneo de Catamarca, analizó esta Liga de Calera.
“El equipo está entrenando durísimo desde el día uno, siempre buscando mejorar y estar en condiciones de ganarle a cualquier equipo. Quizás no estamos en el lugar donde nos gustaría estar pero estamos convencidos de que si hacemos las cosas como las venimos trabajando vamos a permanecer en la Liga”, dijo el punta cordobés y agregó: “A este equipo le sobran ganas y actitud; la idea es transmitir todo eso en la cancha y este fin de semana dejar todo”.
La Calera jugará el viernes contra Tunuyán, el sábado frente a Estudiantes y cerrará contra La Matanza en un cuadrangular que entrega tres plazas para la A2 2019 y el restante descenderá a la Liga B1.
En la fase regular, el conjunto dirigido por el “Cabezón” Fernández finalizó sexto de la Zona A, la más pareja de todas y que tuvo a Tunuyán como mejor quinto. “La mayoría de las ligas que jugué me tocó enfrentar a equipos del norte. Sabíamos de lo pareja y dura de la zona que nos tocó, de equipos con grandes proyectos, jugadores y ambiciosos a la hora de conseguir resultados. Más allá de todo eso creo que tuvimos nuestras oportunidades para pasar de zona pero la inexperiencia de la primera Liga nos jugó un poco en contra. Por eso la intención es que esta Liga sea una Liga de adaptación para La Calera y año a año pueda seguir creciendo y afianzándose porque es una gran plaza para el vóley nacional”.
Sobre el cuadrangular que se viene y a dos días de viajar rumbo a Mendoza, Montalbán (semifinalista en 2017 con Ateneo) analizó: “Imagino tres partidos de mucha tensión, presión y adrenalina. Cuatro equipos que se juegan todo por el todo por mantener la plaza para la Liga siguiente no es poca cosa y será un desafío enorme para cada uno que esté presente”, aseguró y completó: “A Tunuyán ya lo enfrentamos en dos oportunidades, sabemos todas sus virtudes y defectos pero no deja de ser un rival sumamente complicado que no clasificó entre los cuatro por un punto. A los demás equipos no los conocemos mucho, sólo tenemos algunos datos de sus jugadores por el momento. La idea será ir partido a partido en busca del objetivo”.
Sin dudas, en este 2018 Montalbán se encontró con una realidad diferente a lo que venía siendo en su pasado reciente en Ateneo, una plaza protagonista en el campeonato en las últimas tres ediciones. Con otro tipo de desafío por delante, el jugador cordobés finalizó contando cómo vive esta A2 distinta en La Calera.
“Ateneo para mí y para mi carrera fue algo mágico, algo un poco irreal a lo que uno está acostumbrado, que me hizo salir de la realidad de la vida misma. La sintonía con la gente, la cancha llena, el aliento constante por las redes sociales y demás te hace sentir todo el tiempo importante. El hecho de jugar en un mismo equipo muchos años consecutivos te hace tener que buscar todo el tiempo estar mejor y Ateneo me provocaba que año a año el cambio se notara mucho y me exigiera a más del 100%. Al buscar siempre el ascenso creo que teníamos que estar a la altura de semejante objetivo”, relató y siguió: “La Liga que me toca vivir es un poco diferente en muchos sentidos, un equipo nuevo, con muchos jugadores locales y de corta edad, pero con muchas ganas de aprender y crecer. Mi rol es diferente y mi idea es inculcarles a los más chicos la ideología del trabajo duro, el trabajo en equipo y el dejar todo porque nadie sabe si habrá una liga siguiente. El objetivo es diferente al de las ligas anteriores y con un mal momento en lo personal fuera del vóley, pero la vivo con el mismo compromiso y profesionalismo que me caracteriza. Es una Liga de muchísimos aprendizajes. De remarla ante muchas adversidades que me tocan y nos toca atravesar como equipo y seguir en la búsqueda personal y colectiva de crecer, no sólo como deportista sino como personas. De eso se trata el deporte y la vida”.
María Eugenia Candal
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