Más de un fan polaco debe estar todavía vibrando. Es que, el fin de semana, por primera vez el cubano Wilfredo León Venero se puso la camiseta de la Selección de Polonia, la cual hace rato se perfilaba como su nueva escuadra, y este lunes él mismo anunció en redes sociales que está a la espera de su debut oficial.
Fue una de las noticias que surgieron desde el Juego de las Estrellas que además ofició de despedida de Pawel Zagumny en Polonia. En un momento, el Spodek Hall de Katowice se fundió en una bienvenida para el cubano León, que en pleno estadio recibió la camiseta número 9 de Polonia, con su apellido en las letras rojas sobre blanco. No le tocó entrar, pero fue mucho más que un simbolismo.
León dejó de jugar para Cuba en 2013, con el tercer puesto en la Liga Mundial de 2012 como último resultado grande con su país natal. Todavía en épocas de restricciones, el talentoso y potente punta eligió resignar su equipo nacional para meterse en la elite de clubes y desde 2014 defiende las ropas del Zenit Kazan ruso, con el que fue campeón europeo y también llegó al Mundial de Clubes.
En 2015, León obtuvo la doble ciudadanía (su esposa es polaca) y, desde ahí, comenzaron los procedimientos para esta incorporación al equipo de blanco y rojo. Ya había dicho el cubano, en su momento, que haría «todo lo posible para jugar para Polonia» y que, en su opinión y de acuerdo a las gestiones y la respuesta de la Federación polaca, quizás el momento sería luego de los Juegos Olímpicos de Río 2016. Pronóstico acertado.
En su cuenta de Instagram, celebró la posibilidad de «finalmente» ponerse la camiseta de Polonia y agradeció la «cálida y ruidosa bienvenida». «Espero que mi debut oficial llegue pronto», remató, mientras el mundo del vóley espera por volver a verlo en acción en la escena de selecciones.