Segunda temporada consecutiva que el club de la ciudad, en su rama masculina, participa de la Liga Argentina A2 y siempre lo hizo bajo la dirección técnica del experimentado entrenador que así expresó el momento del proyecto: “En la organización estamos muy bien, nosotros le ponemos mucho, estamos entrenando como un equipo de A1”. Toda la semana por la noche y tres días de doble turno (además de las jornadas “de pesas”) es el planificación realizada gracias al avance que se propone año a año el Club Rosario.
El primer año de los varones tuvo un arranque “muy dulce”, ganar de local y de visitante, llegar a 9 victorias consecutivas, jugarle de igual a igual al campeón y “Paco”, como se lo conoce en el mundo vóley, se mostró feliz: “Terminamos muy conformes con lo del año pasado, haber estado entre los 8 fue muy bueno”, comentó tras realizar la habitual practica matutina en Atalaya.
“Buscamos repetir, el lugar que queremos es estar ahí”, rápidamente agregó sin dudar.
En el segundo año trae consigo la renovación del cuerpo técnico, junto a García están Omar “Palomo” Grasso, Juan Parisi y José Pecce, sumado al trabajo de estadísticas de Renzo Briozzo hacen que esta temporada, según “Paco”, “sea innovadora”. “No es fácil ponerse de acuerdo tantos entrenadores buenos como hay en el plantel. Lo ventajoso es que bajamos una línea y vamos por el mismo trabajo. No tenemos egos” dijo y destacó el gran trabajo de la Asociación Rosarina de Voley, con el Lolo Verasio a la cabeza, en unir a este CT.
“Paco” García llamó a mancomunar un trabajo en el marco del Club Rosario: “Somos muy abiertos a los que quieren colaborar, necesitamos los entrenadores volver a sentarnos y hablar de vóley, criticarnos y dialogar sobre formas de entrenamiento”.
Luego remarcó al resto del cuerpo técnico: “Hay una buena organización, con Juan Pablo Guglietmett (Manager), Gastón Amione (Preparador Físico) y Carlos Belaustegui (Kinesiólogo)”. Ellos hacen posible que este plan se lleve a cabo de la mejor manera.
“El cuerpo técnico tiene confianza para ir hacia el mismo lado y cada uno nos aceptamos las críticas, si no vamos para un mismo lado, y si no hay una organización, no me gusta trabajar en esos lugares que se hacen las cosas a medias, o las hago al 100% o no las hago”, declaró con firmeza.
“El primer gol fue poner en marcha el proyecto de Club Rosario en varones y fortalecer el de mujeres, gran importancia de Juan D’angelosante que empuja junto a Gabriel Di Pancrazio y Eduardo Stuppenni, entre otros”, realzando el ímpetu dirigencial para progresar en el proyecto.
En segunda medida fortaleció la idea de que “se mantenga a lo largo del tiempo, más allá de que si estemos nosotros o no”. El cuerpo técnico dejará un modelo de trabajo para continuar con este proyecto, pensando el largo plazo y con la expectativa que los entrenadores jóvenes “puedan seguir el modelo”. “En el CT no tenemos egoísmo y miramos los jugadores por el bien de ellos, queremos que crezcan”, añadió mientras miraba el pasar de sus dirigidos que abandonaban el gimnasio del club de la Sexta, lugar donde las mañanas de doble turno el Club Rosario hace uso de sus instalaciones.
En el 2017 se estrenó la línea de juveniles del Club Rosario, el DT sostuvo la importancia de esta novedad ya que esos chicos jugaran el interasociaciones el próximo año y con una “base súper formada” tendrán ventaja sobre los rivales. Cuarenta deportistas de 16 a 19 años son evaluados por el cuerpo técnico y de esa evaluación saldrán los últimos convocados para jugar la Liga A2.
“Hemos tenido sorpresas porque algunos jóvenes van a estar dentro de los 14 (la base del plantel) que van a participar”, agregó con un gesto de aprobación para esta nueva medida de la línea blanca.
El proyecto de club de clubes le trae doble trabajo, no sólo debe ser entrenador sino que además seleccionador del producto del vóley de Rosario es por eso que se animó a analizar el presente del mismo: “Hay muy buen grupo de 17, 19 y 21; el inconveniente es que no hay mayores”, declaró. Para luego marcar los casi 12 jugadores rosarinos que integran la Liga A1 y esperanzarse que vuelvan a la ciudad para sumarse a la intención de la ARV.
Las características del torneo de la ciudad son chicos de 15 a 19 años que juegan en primera por la falta de deportistas y no es positivo. “El problema no es que son malos jugadores es que entrenan poco”, esbozó.
“No te olvides que tenemos muchos jugadores que están en 5to año y les damos días, tenemos que respetar el estudio por ellos, porque primero está la educación”, aclaró el técnico que también es profesor en el Instituto de Educación Física ISEF Nº 11.
No dudó ni un segundo en remarcar las prioridades: “Queremos que ellos se reciban, 5to año o la facultad. Primero está el estudio, es algo que hablamos con los padres. No hay que olvidarse nunca que tenemos pibes de 17, 18 o 19”, mientras asentaba sus dichos apoyando el dedo índice en la mesa.
Siguiendo la línea que marcó el presidente de la ARV, Claudio Verasio, el ex entrenador de PSM dijo: “Las puertas están abiertas para los que se van y quieren volver”, asimismo sumó la responsabilidad de estar porque “es nuestra ciudad, nuestra asociación, la que nos vio crecer, es la ciudad que nos apoyó con esta oportunidad”.
El Club Rosario sufrió la baja de algunos integrantes del primer plantel que “aportaban” por eso “Paco” apunta al proceso: “No podíamos retener a los jugadores que le llegaron ofertas, es un premio de ellos al esfuerzo, y no sabíamos con quienes íbamos a contar, es un volver a empezar”.
En su plantel, además de los juveniles, el club de la ciudad cuenta con cinco hombres experimentados: El capitán, Pablo Peralta; Rodrigo Péres Lópes, Esteban Zambrano, Sebastián Mancini y Maximiliano Zaccone (que sufrió una lesión antes de la pretemporada pero acompaña al plantel como uno más). El entrenador se apoya en ellos para potenciar a los jóvenes, los respeta y se toma su tiempo para escucharlos, “los grandes tienen que aportar sabiduría y los chicos energía”, manifestó.
Al ser un grupo muy joven (promedio de edad de 21 años) al DT le preocupa la fortaleza mental producto de esta inexperiencia pero rescató el aporte de los nombrados: “Los jóvenes cuando están rodeados de jugadores de experiencia se sienten más seguros”.
García reveló un pensamiento que no sólo lo inculca en el vóley sino también con sus alumnos del ISEF: “El entrenamiento tiene dos cosas, educa y crea valores”. “Esto también es Club Rosario, educar al jugador que para entrenar se tiene que cuidar, tener buena alimentación, cuidarse a la noche, cuidarse él, a la familia y al estudio”, complementó. “Nosotros no nos tenemos que olvidar que estos chicos estudian o los jugadores más grandes que trabajan 10 o 12 horas y después van a practicar. Eso es muy rescatable, quieren entrenar”, enfatizó el técnico.
El lugar que le da “Paco” a los jugadores veteranos es parte del trabajo en conjunto, “Es muy bueno que le hablan mucho (a los juveniles) y le exigen hablando. Cuando un chico se enoja y patea una pelota porque no le salen las coas tratan de transmitirle paciencia, serenidad”. Mantener la confianza de los menores es fundamental ya que los rivales a vencer son equipos con experiencia y con el aporte de los “más grandes” es mucho más sencillo.
“El deporte para mí es totalmente mental” subrayó para acto seguido explicar que el vóley (al ser un deporte de rebote) depende mucho de la técnica y “el control mental del jugador es fundamental, para que no se caiga y no erre seguido”.
Uno de los defectos que vio el DT el año pasado fue que los experimentados pudieron mantener su jerarquía mientras que los inexperimentado bajaron su nivel en momentos determinantes.
Ya pasó el primer amistoso vs Rosario Central, la semana próxima el equipo tendrá roce con clubes que se preparan para la Liga A2 y “después habría que medirse con equipos de mayor nivel”, opinó “Paco” que agregó “necesitamos jugar mucho, nos falta tiempo para hacer amistosos y tratar de ver cómo estamos nosotros”.
El arranque de la liga será en menos de un mes y la idea voleybolistica del entrenador es ofensiva, puntualizó en mejorar el ataque, aspirar a tener un buen nivel de pase y recalcó los buenos bloqueadores y el entendimiento del juego. “Vamos a intentar ser fuerte en la parte bloqueo”, reveló.
Las primeras semanas de entrenamientos le trajeron sorpresas al cuerpo técnico, “los pibes están defendiendo mejor de lo que esperaba, en la recepción el equipo no va a sufrir”. Y volvió a marcar el problema en ofensiva: “Es una cuestión de elección y que los jugadores entiendan a qué queremos jugar”.
“Lo importante de un equipo es que sepa a qué quiere jugar o a qué puede jugar”, sentenció.
Mejorar la capacidad de análisis, atacar con potencia, errar poco y tener paciencia son los ejes que busca ajustar tanto él como su grupo de trabajo. “Vamos a tener que mejorar en lo que cada uno hace bien”, explicó y nuevamente remarcó la importancia de partidos “para llegar a un mejor nivel”.
A la hora de analizar el estado de la liga con la que se va a encontrar el Club Rosario fijó en los equipos que deciden reforzarse con jugadores del torneo metropolitano como los clubes que van a marcar una diferencia, ya que tienen una mejor competencia y eso los potencia. Aunque no desvalorizó a su plantel, “podemos ganar o perder con cualquiera” dijo.
“El año pasado de local fuimos muy fuertes” afirmó y eso es un factor muy importante. “La gente se portó 10 puntos con nosotros, nos apoyó y la verdad que lo que sentimos fue muy bueno y las críticas siempre fueron constructivas”, suscribió el entrenador que espera que esta temporada se vuelva a repetir ese marco de público.
Ariel García regresó sobre sus palabras para marcar la importancia de los jóvenes: “Hay algunos que están muy bien y otros que esperamos mucho más. Los jugadores tienen que tener en cuenta que cualquiera está listo para jugar y nadie se puede sentir titular”, cerró sin titubear.
Pidió por la competencia del Grupo Blanco porque eso le daría la motivación para estar a la altura cuando se los requiera. “Ahora los jugadores están haciendo un trabajo físico muy importante” sostuvo pero sin dejar de pensar en los encuentros de preparación.
Casi en el final de la dialogo el entrenador de la línea azul marcó un objetivo por fuera de lo deportivo: “Terminar con la misma comunión deportiva y social. Que se siga haciendo. El objetivo es que el grupo entienda lo importante que es para ellos esto, el año pasado se entendió muy bien y esperemos que este año se pueda repetir”.
Al mismo tiempo fue explicitó en cuanto a su postura: “Para nosotros sería un placer seguir trabajando porque estamos muy bien como Cuerpo Técnico”.
Para finalizar la entrevista resumió su pensamiento del proyecto Club Rosario: “Es el desarrollo del voleibol de nuestra ciudad sobre todo porque nos exige una gran responsabilidad tanto a mi como a todo el cuerpo técnico. Más allá de los éxitos deportivos lo que buscamos es que el vóley de Rosario siga creciendo, que nuestros chicos se sigan proyectando, que la competencia del vóley local se fortalezca, que jugadores quieran volver y que los dirigentes quieran seguir apostando por este proyecto”. Concreto Ariel García con la idea, a la que le sumó el agradecimiento a la dirección de deportes de la Provincia, la Municipalidad y la Asociación Rosarina de Vóley.
“Le estamos poniendo mucho trabajo en común y coordinado entre todos que miramos todos con el mismo objetivo”, concluyó el DT que inmediatamente que terminó la charla volvió al gimnasio de Atalaya para seguir de cerca la línea blanca que estaba entrenando con el resto del cuerpo técnico.
Fuente: Prensa Asociación Rosarina de Voleibol