MUPOL es el egresado bañado en harina y huevos que acaba de recibirse después de años de esfuerzo, es la chica que está a punto de bailar por primera vez con su enamorado aunque no sepa cómo terminará el cuento o es el joven que convive con los nervios y la ansiedad de su primer día de trabajo. MUPOL es el club que no sale siempre en la tapa de los diarios, pero es el que supo darle rienda suelta a sus sueños y llegó a cumplirlos, aunque eso no se traduzca por completo en trofeos que hagan brillar sus vitrinas. En las puertas de su primera Liga Argentina femenina, Juan Pablo Procopio y la “Chuza” Michettoni le ponen voz a un equipo que quiere hacer ruido entre los mejores del país.
Así se sienten los integrantes de la Mutual de Suboficiales de la Policía Federal, esa que hace no muchos años atrás podría haberse convertido en un estacionamiento de autos, pero terminó siendo un polideportivo con cancha de vóley. Y vaya si fue correcta la decisión.
Paso a paso y sin quemar etapas, MUPOL fue creciendo con el paso de los años. Ascendió a División de Honor y se mantuvo, se consagró campeón de la Liga A2 y, desde ese día, duerme y se despierta con la Liga Argentina femenina en la cabeza. “Soñamos con ser parte de la Liga y trabajamos para eso, para ser lo más competitivos posible y asumiendo la responsabilidad y compromiso que la misma exige. Estamos con muchas ganas de ser parte de esto”, aseguró Juan Pablo Procopio en diálogo con Somos Vóley.
Aunque maneja bien su ansiedad, el entrenador reconoce que el equipo que dirige “representa a muchos clubes chicos que sueñan con algo así y nos gusta pararnos en ese lugar. Hace 3 años, cuando nos tocó sostener la División de Honor, les dije a todos que quería jugar la Liga y hoy estamos cumpliendo esa meta. Era una utopía y hoy es una realidad”. Además, no se prohíbe disfrutar de esta experiencia desde lo personal: “Es un desafío superador. Imagínate que formaste una familia enorme por mucho tiempo y la llevas a Disney, algo que hace unos años era inalcanzable”.
Claro que esa ilusión es la misma que tienen encendida las protagonistas que empezarán a escribir la historia desde el 23 de enero. “Esta oportunidad es única para una institución como la nuestra y tenemos que aprovecharla al máximo”, sostuvo María Rosa Michettoni, más conocida como “Chuza”.
La jugadora de 37 años, a la que le costaba imaginarse volviendo a hacer de las suyas en una Liga, sabe desde su experiencia que el equipo debe lograr un juego ordenado y sólido para poder buscar los mejores resultados. En esa línea, el técnico enumeró: “Disfrutar, trabajar, potenciarnos, divertirnos haciendo lo que más nos gusta y como siempre hacemos, molestar lo más que podamos a quienes nos quieren ganar”.
Para la nueva aventura que se aproxima, Rocio Carrete, Marian Uzner, Pilar Ohanessian, Sonia del Pra, Cecilia González y Melina Pellegrino se sumaron a Melisa Iglesias, Stefania De Vita, Paula Gulman, Aldana Ibáñez, Jesica Vasallo, Camila Aguilar, Magali Przylucki y “Chuza”, que ya defienden la camiseta del equipo policial hace tiempo. Además, Camila Sarubi y Micaela Geler le aportan al plantel aire joven de inferiores.
Si bien tienen los pies sobre la tierra y saben que -a priori- San Lorenzo, Estudiantes de La Plata, Banco Provincia La Plata, Villa Dora y San José de Entre Ríos serán duros rivales de jerarquía que deberán enfrentar en la fase de grupos, MUPOL tiene en claro que su objetivo es poder mantener el lugar en la Liga el próximo año. Y para lograrlo, intentarán jugarle de igual a igual a quien las mire de frente desde el otro lado de la red. “Siempre que podamos hacer ruido, lo vamos a hacer”, avisó Procopio. Y Michettoni sentenció: “Estamos dispuestas a darles batalla y que el hecho de enfrentarnos les genere una inquietud”.
Rocío García