En Polonia se juntaron dos leyendas argentinas, entre muchas otras del mundo. Raúl Quiroga y Marcos Milinkovic fueron convocados para un partido exhibición y a beneficio junto a memorables jugadores de la talla de Giba, Vladimir Grbić, Andrea Zorsi, Andrea Anastasi, Samuelle Papi, Mauricio, Goran Vujevic.
La particularidad de un evento con tantos grandes jugadores fue que dos actuales campeones de la Liga Argentina con UPCN Vóley de San Juan estuvieron presentes: El estadounidense David Lee y el polaco Zbigniew Bartman.
La cita: “Juego de Leyendas”. La ciudad: Lodz. El Estadio: Atlas Arena. El objetivo: Recaudar fondos para proyectos sociales en todo el mundo. Transmitió Eurosport en vivo.
Contacto con el público, tres sets de juego a 21 puntos, música de apertura y otra estrella, ahora de la música pocala, Dawid Kwiatkowski, ganador del MTV Award para Europa central y oriental. Y fotos, muchas fotos.
Pero también hubo fuerte emoción para Marcos Milinkovic.
La pequeña Dunja, 10 años, hija del ex capitán argentino, lo sorprendió junto a mamá Jelena, serbia ex pareja de Marcos. «Nos homenajearon a mí y al serbio Vujevic, que lamentablemente hace un año también perdió a un hijo; trajeron a las familias de los dos. Fue muy emotivo, algo que no esperaba», le contó el entrenador argentino y manager de UNTREF Vóley al Diario Olé.
Raúl Quiroga, el atacante más importante de la historia del vóley argentino, vivió momentos de emoción: “Fue muy lindo. Hablábamos todos el mismo idioma. Fue un espectáculo hermoso. La gente estaba enloquecida, hay mucha pasión por el vóley. Todos queríamos jugar, yo incluso a pesar de mi operación en el hombro. Eso me dio tristeza. Tenemos muchas ganas de que se vuelva a hace. Somos parte de las generaciones que vivimos grandes cambios. Firmamos autógrafos más de una hora. La organización espectacular, hubo momentos muy emotivos. Cuando lo vi a Alexander Savin el ruso sentí un orgullo muy grande, me saqué una foto con él, y me dijo que se acordaba de mi”.
Para Milinkovic fue muy especial: “Estuvo muy lindo, muy emocionante. Fue un orgullo enorme estar en un partido con tanta historia. Hubo figuras de todas las épocas. Maravilloso”.
Dawid Kwiatkowski