Luego del épico 3-2 sobre Polonia, Argentina tendrá por delante otro duro rival este sábado: Serbia. El equipo dirigido por el histórico Nikola Grbic, este viernes, embolsó un enorme resultado sobre Francia en cinco sets con la premisa que el DT enarboló en diálogo con Somos Vóley: «Quiero que mis jugadores encaren cada partido en forma única».
Serbia llegó a esta instancia desde el segundo lugar de su zona de primera fase del Mundial, disputada en Bari, en la que perdió por 3-2 con Estados Unidos y más tarde sorprendió a un favorito como Rusia, con un nuevo 3-2 pero a favor. Ahora, en Varna, forman parte del durísimo cuadrangular que tiene además a Argentina, Francia y Polonia.
Campeón olímpico como jugador de la antigua Yugoslavia en Sydney 2000, el ex armador Grbic es el entrenador de Serbia desde 2015. En la charla con Somos Vóley, evitó hablar directamente sobre cualquier adversario. «Quiero que mis jugadores encaren cada partido en forma única, una a la vez. Estamos estudiando cuidadosamente a los oponentes para mantener nuestra buena campaña. Nuestro grupo en Bari era muy difícil y en Varna no será diferente, por lo que es preciso tener mucho foco», afirmó Grbic.
El DT no quiso hacer proyecciones sobre hasta dónde podrá llegar Serbia en el Mundial. Hace cuatro años en Polonia, con la misma base pero con la dirección de Igor Kolakovic (hoy, técnico de Irán), Serbia fue eliminada en esta misma segunda fase. Y más tarde, ya con Grbic, no consiguió clasificar para los Juegos Olímpicos de Río 2016. En este Mundial, entonces, los serbios se muestran cautelosos.
«Es un torneo muy equilibrado, hay por lo menos ocho selecciones que pueden conquistar el título. No me arriesgaría a decir qué vamos a conseguir, pero tuvimos un buen comienzo y podemos llegar lejos si mantenemos la concentración», resaltó el serbio.
Sidrônio Henrique
Especial para Somos Vóley